Hazte prisa, que tenemos que salir.
Rumbear al norte por intento de seguir
Lamiendo botas ajenas,
Comprando soluciones obscenas.
Hazte prisa, que hoy hay que huir
De los lamentos eternos de nuestras
Consciencias empedernidas,
De los hallazgos obvios pero aun desconocidos
Que siempre los hay por el camino.
Hazte prisa, pues ahora nos queda correr
Hacia horizontes desbravados y quizás aburridos.
La no novedad del odio que mueve y aplasta,
Que nasce y crece mientras subastas
Las sobras dejadas por tu inconsciencia.
Hazte daño, pues ya no hay más que hacer.
No llorar muertes centenarias,
Ni plantear el soñado viaje a Canarias.
Surcar la dura arena
Buscando tus viejas penas.
Hazte prisa, ya vas a morir!
Por mis manos, las tuyas y las del ocaso;
Dejarás atrás los lamentos no pronunciados;
Llevarás contigo la eterna soledad en que viviste.
Ernesto Molinas
27/01/2010
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